La vida es una aventura o no es nada. – Stephen Antonow

Un amigo sacerdote recomendó Una Vida Con Propósito por Rick Warren. A pesar de no haberlo terminado (el curso consiste en cuarta días con una meditación en cada día) tengo que admitir que estoy disfrutándolo. El pastor Warren usa ejemplos sencillos y citas bíblicas para exponer las enseñanzas cristianas básicas como plan de vida. Al hacerlo, cumple una gran necesidad.

Vivimos en una cultura que niega que la vida tiene un propósito. Cierto que sugiere unas metas como la seguridad económica, buena salud, entretenimiento, la auto-estima que viene de la aprobación y cumplir bien algún proyecto – pero nada que realmente se puede considerar como un propósito. Podemos evadir la pregunta diciendo que estamos viviendo, trabajando, haciendo sacrificios para otras personas. Es muy noble, pero no explica cual es el propósito de esas personas.

Como el Señor Warren explica, no podemos crear un propósito para nuestra vida. Solamente podemos descubrir lo que es. Los naturalistas (darvinistas) hablan de la “natura” que tiene un “diseño” pero no explica lo que quieren decir por esas palabras. Solamente una persona – una mente, una inteligencia – puede diseñar algo. Sin eso, el universo no es una narración – solamente una serie de eventos que salen uno del otro. Y nuestras vidas no tienen mas significación que una tormenta en Júpiter o una babosa que mueve en un jardín.

Jesús presenta otro punto de vista en el evangelio de hoy. Habla de una prueba seguida por la disolución del mundo natural y luego el juicio. La historia human tendrá un acto final. Nuestras vidas son parte de un drama coherente. Pero el drama abre a la eternidad – y nuestras vidas aquí son como un ensayo para papeles que tendremos para siempre.

Un feligrés de Sagrada Familia que murió el mayo pasado ilustra el drama de la vida humana. Lo cité arriba: La vida es una aventura o no es nada. Steve era un hombre brillante, pero con una aflicción horrible – una atracción al mismo sexo que lo condujo a un estilo de vida que causó destrucción a sí mismo y a otros. Se había hundido en un infierno que el mismo creó. Consumerismo, pornografía, drogas, alcohol, promiscuidad y el descartar de los que ya no tienen cuerpos bonitos son las cosas que señalan el “estilo gay.”

Por la misericordia divina y la ayuda de un movimiento llamado Courage (Valentía), reconoció que lo que se llama un estilo de vida se puede denominar mas exactamente como un estilo de muerte. Así embarcó en una gran aventura – la búsqueda para la santidad, es decir, amar a Dios con todo el corazón. Sabía que tenía que hacer una elección radical: La santidad y el infierno. Y es así para cada uno de nosotros - pero no lo vemos tan claramente como una persona que está tratando de recuperarse de una adición.

Hace un año y medio Steve empezó a experimentar dolores abdominales, insomnio y nausea. Cuando finalmente fue al médico, recibió una diagnosis terrible: cancer pancreático. Steve no escondió sus sentimientos, pero reconoció que su enfermedad, con su dolor amargo, no era la absurdidad final – sino una parte integra de la aventura a la cual Dios le había llamado.

He visto a muy pocas personas morir con la claridad de fe que Steve poseía. Hace unos años vio la inutilidad de tratar de crear su propio significado. Se rindió a Dios y descubrió el propósito, la aventura que Dios le había preparado.

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