La Catástrofe que Viene

(Homilia Para el 33o Domingo, Año C)

Cuando yo estaba en el Perú, muchas personas me preguntaron sobre las Torres Gemelas. Aún en aldeas de la sierra, la gente se identificó con aquella representación de nuestra economía global. La pérdida que nos sentimos el 11 de setiembre nos da alguna idea como los judíos de primer siglo se sentieron sobre el Templo. No solamente representó su unión como un pueblo sino su relación con Dios mismo. Sin embargo, cuando Jesús escuchó a ellos admirando la solidez de su construcción y su belleza, les dí una profecía famosa: pronto todo será destruido.

Antes que los secuestradores atacaron el Centro Mundial de Comercio, hubo moniciones semejantes. El 30 de noviembre de 1998, Peggy Noonan escribió una columma prediciendo aquel tipo de golpe en la isla de Manhattan. Quizás, en una forma parecida, Jesús usaba su inteligencia humana para analizar la situación social y política de su mundo. De todos modos tenía una visión extraordinaria y querría que sus seguidores fueran preparados.

Sin embargo, Jesús no era un Jim Jones o David Koresh, inspirando un pánico fatal. Al contrario, él nos llama a una cierta serenidad. La gran catástrofe no vendrá inmediatamente. Será precedida por una menores: guerras, terremotos, epidémias y hambre. Para la mayoría de nosotros, esas cosas suceden a una distancia, pero nos dicen que debemos prepararnos interiormente. Nuestra vida cómoda no durará mucho tiempo más.

¿Como se puede esperar lo peor y al mismo tiempo permanecer tranquilo? Parece una paradoja imposible. No obstante, uno de los hombres más serenos que conozco es alguien que siempre espera lo peor. Sabe que después del amanecer del sol siempre viene la noche oscura. Pero es un hombre de mucha paz, muy atento a cada persona que encuentra.

Jesús quiere algo semejante para nosotros: No imaginar que podemos entrar un agujero y así escapar el disastre que viene pronto y que es la suerte común de la humanidad. Al mismo tiempo, reconocer que, si estamos con él, no necesitamos preparar una defensa, que "no caerá ni un cabello de la cabeza de ustedes."

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Versión Inglés

De los Archivos (Homilía para Domingo Treintitres - Año C):

2007: De Dia y De Noche Trabaje
2004: Enfrentando el Fin de la Vida
2001: La Catástrofe que Viene

Boletín (Mayordomia, Accion de Gracias)

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