Mientras estaba de vacaciones, leí­ el libro de Mike Aquilina The Fathers of the Church (Los Padres de la Iglesia). Me impresionó la carta de Basilio al Papa Dámaso:

"Casi todo el Este (incluyo bajo este nombre todas las regiones desde Ilírico hasta Egipto) está agitado, muy honorable padre, por una tormenta terrible. La herejí­a vieja, sembrada por Arrío el enemigo de la verdad, ha reaparecido sin verguenza. Como una raí­z amarga, está produciendo un fruto mortal y está prevaliendo. La explicación es que en todo distrito los campeones de ortodoxia han sido botados de sus iglesias por calumnia y ultraje, y el control de los asuntos ha sido entregado a hombres quienes están destruyendo las almas de hermanos mas sencillos."

Basilio escribió esta carta en el siglo cuatro. Los estudiosos patrísticos lo llaman la Edad de Oro, a causa de maestros tan grandes como Atanasio, Gregorio de Niza, Cirilo de Jerusalén, Eusebio el historiador y un poco más tarde, Jerónimo y Agustín. No obstante, la parábola de hoy aplica a esa época: junto con el trigo de enseñanza sólida, la cizaña de doctrina falsa iba a crecer y no iba a ser tan fácil distinguir uno del otro.

Los arrianos negaron la divinidad de Cristo, pero en una forma sutil. Usando lenguaje bíblico, refirieron a Jesús como Señor, el Alfa y la Omega, el Hijo de Dios. Sin embargo, vaciaron estos títulos de su significado verdadero porque enseñaron que Jesús fue creado en tiempo y que había un tiempo cuando no existía. Esta enseñanza ganó a muchos porque fue cómoda para el racionalismo de la cultura griega.

Podemos ver algo semejante hoy. Maestros falsos toman palabras que tienen raíces profundas en la tradición cristiana y usarlas en formas que las vacía su significado.* Hasta muy recién, nadie debatía el significado de las palabras matrimonio y familia. Ahora nuestra cultura quiere usarlas en un sentido radicalmente diferente. Estaba en el Perú cuando el parlamento español legalizó el "matrimonio" homosexual y la adopción de niños por ellos. Como la madre patria España todavía tiene gran influencia en Latinoamérica.** Muchos ven esto como la onda del futuro, igual que Arrianismo parecí­a irresistible en el siglo cuatro.

En su carta, Basilio apeló al papa Dámaso a visitarlos: "He llegado a la conclusión que la visita de vuestra misericordia es la única solución posible para nuestras dificultades." Basilio vio al papa como la piedra de toque de la ortodoxia. Esto aplica hoy. Quizás no sea prudente sacar las cizañas de doctrina falso por el propio poder de uno, tenemos que hacer todo posible para discernir lo que es trigo y lo que es cizaña. Unión con el Santo Padre es un criterio importante.

Algún día Dios mismo separará el trigo de la cizaña. Pedimos su ayuda para seamos en el lado correcto cuando suceda.

**********