Tema básico: El Buen Ladron muestra que, con Jesus, jamas es tarde para hacer un nuevo comienzo.

Hoy es Domingo de Cristo Rey - el ultimo domingo del anno liturgico. El proximo domingo - Primer Domingo de Adviento - comenzamos un nuevo anno liturgico. Cada anno esta dominado por uno de los tres Evangelios: Mateo, Marcos y Lucas. Leemos el Cuarto Evangelio - San Juan - durante la cuaresma, Pascua y unos otros domingos durante los tres annos. Este anno hemos leido de San Lucas. Empezando el proximo domingo normalmente leeremos de San Mateo.

Entonces estamos al fin de un anno. Es interesante que hoy tenemos el Evangelio del Buen Ladron. El muestra que, con Jesus, jamas es tarde para hacer un nuevo comienzo. Era un hombre, que en su agonia final, encontro la salvacion. Antes de examinar lo que sucedio aquel dia, debemos recordar que era una ladron en aquel entonces. No era solamente alguien que agarraba un pan o un monedero. En el dia de Jesus, los ladrones se escondian en cuevas en los cerros, armados con navajas y palos. Atacaban a viajeros, golpeandos, robandolos y dejandolos para morir. En la Parabola del Buen Samaritano, Jesus describe un hombre atacado por ladrones. Un ladron en el tiempo de Jesus no era un "Robin Hood." Era un hombre que causo miedo y desprecio. Al llevarlos a la justicia, los romanos ganaron el favor publico.

Jesus fue crucificado entre dos ladrones. La gente probablemente lo vio como culpabilidad por asociacion, pero para Jesus eran dos hombres con almas eternas. Uno, desgraciadamente, era endurecido y amargado. Pero el otro tenia una conversion admirable. Acepto su propia culpabilidad. "Nosotros justamente recibimos el pago de lo que hicimos." Y, con eso, hizo un acto de fe: "Señor...acuerdate de mi."

El Buen Ladron nos da animo. A pesar de lo que hemos hecho, los errores que hemos cometido, Jesus no ofrece esperanza - la posibilidad de un nuevo comienzo.

Nos da una segunda oportunidad no solamente en la hora de nuestra muerte, sino todos los dias. Al pensarlo bien, Dios ha ordenado las cosas tal cada dia es una invitacion para un nuevo comienzo. Dormirse es parecido a la muerte - un acto de dejar las cosas. Y cuando nos despertamos, es como un nacimiento: poco a poco vemos el mundo que nos rodea, lleno de posibilidades. Cada dia es una oportunidad para un nuevo comenzar.* Cuando dedicamos el dia a Jesus, nos quita los limites del horizonte. Renueva todas la cosas.

Es algo de pensar cuando terminamos el anno liturgico y - el proximo domingo - comenzamos un nuevo ciclo liturgico. Es un buen momento para enfrentar nuestros pecados - nuestra necesidad para Jesus y la nueva persona que podemos ser en el. Y decirle, "Señor...acuerdate de mi."

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