Señor Jesús, en tu nombre y con el poder de tu Sangre preciosa sellamos toda persona, hecho o acontecimiento a través de los cuales el enemigo quiera hacernos daño.
Con el poder de la Sangre de Jesús sellamos toda potestad destructora en el aire, en la tierra, en las fuerzas satánicas de la naturaleza, en los abismos del infierno, y en el mundo en el cual nos movemos hoy.
Con el poder de la Sangre de Jesús rompemos toda interferencia y acción del maligno. Te pedimos Jesús que envíes a nuestros hogares y lugares de trabajo a la Santísima Virgen acompañada de San Miguel, San Gabriel, San Rafael y toda su cohorte de santos ángeles.
Con el poder de la Sangre de Jesús sellamos nuestra casa todos los que habitan en ella (nombrar cada uno de ellos), las personas que el Señor enviará a ella, así como los alimentos y los bienes que El generosamente nos envía para nuestro sustento.
Con el poder de la Sangre de Jesús sellamos tierra, puertas, ventanas, objetos, paredes y pisos, el aire que respiramos y en El colocamos un círculo de su Sangre alrededor de nuestra familia.
Con el poder de la Sangre de Jesús sellamos los lugares en donde vamos a estar este día y las personas, empresas o instituciones con quienes vamos a tratar (nombrar cada una de ellas).
Con el poder de la Sangre de Jesús sellamos nuestro trabajo material y espiritual, los negocios de nuestra familia y los vehículos, las carreteras, los aires, las vías y cualquier medio de transporte que habremos de utilizar.
Con el poder de la Sangre de Jesús sellamos los actos, las mentes y los corazones de todos los habitantes y dirigentes de nuestra patria, a fin de que tu paz y tu corazón al fin reinen el ella.
Te agardecemos Señor por tu Sangre y por tu Vida, ya que gracias a ella hemos sido sellados y somos preservado de todo lo malo. Amén.